La Bonita.

(No pensé escribir sobre ti)

Llegaste a mi vida inesperadamente. Llegaste a mi vida para acompañarme, cuidarme y hacerme sonreír. Llegaste a mi vida en el momento preciso.  Orejas largas, color canela con manchas negras, chancha, sapaza, loca & rabiosa (como Shakira), pelo por todos lados, ladradora,  obediente, palomilla, juguetona, inteligentísima, bonita.    

Cada vez que me levanto y abro mi puerta,  vienes tú a darme los buenos días (o las buenas tardes jaa!), siempre de buen humor  a la hora que sea, haga frío o no, me acompañas sonámbula a donde vaya.  Si alguien abre mi puerta y yo aún sigo durmiendo, tú sin aviso, te subes a mi cama, sigilosa, haces un espacio y te echas conmigo (al final yo termino durmiendo doblada en una esquinita y tú en el medio con la oreja en la almohada).

Llego cansada a casa,  casi siempre, renegando por un mal día o por el día sin sentido, abro la puerta y vienes corriendo como Pedro Picapiedra a recibirme,  yo tengo que esquivarte porque   sino me atropellas (cual bola de bowling y los palitroques), muy contenta siempre tú,  no sé como aprendiste a saltar (tremenda chancha) y no sé más aún como aprendiste a dar besos  (tú aprendes muy rápido todo).  Sentada yo viendo tele o frente de la computadora, te sientas a mi lado esperando ser parte de ese momento; Si te sientes ignorada, sin dudar  te subes encima de mis piernas, bajas tu cabezota y esperas que te haga cariñito (rompes el esquema de  lo que estaba haciendo y me haces sonreír o a veces me haces renegar jaja bueno  “es parte de”),  si tienes suerte, te diré  “¿Quién quiere jugar?” ,  tus ojos brillarán  e iremos en busca de las pelotas  y al final siempre seré yo quien corra tras de ti (jajaja).

Estos últimos días estamos conversando más, es parte de mi terapia conversar más (debería de hacerlo con seres humanos ¿no? Baaah!! Para mí no hay diferencia, en verdad que contigo no la hay).  Contigo puedo ser muy sincera, te puedo hablar de cualquier cosa y tú siempre estarás muy atenta  escuchándome,   mirándome, lo loco es que yo siento que tú sientes lo que yo siento,  lo percibo en tu mirada, cuando pones tu nariz fría en mi mano, cuando te arrimas a mí y  sin decir nada me acompañas,  te quedas allí, te quedas allí y te quedas allí, siempre.    Creo que a ti, como a muchas personas, les debo una disculpa, mis reacciones muchas veces no son nada lúcidas, ahora las estoy controlando o más bien equilibrando, al menos trato. Siempre quise darte lo mejor pequeña chancha, siempre quiero darte lo mejor, lo siento porque a veces siento que soy una mala madre, porque no te doy el tiempo que debería darte, porque por mí eres huraña (debí o debo de sacarte más a pasear para que sociabilices, lo sé),lo siento porque mi malhumor recae sobre ti sin tú tener la culpa, lo siento porque  te prometí crecer en una familia feliz y mira lo que pasó, la cagué sin medida (también lo sé), sé que a ti también te duele,  perdóname tú también, perdóname por favor.  Gracias por tu compañía y alegría, sé que a veces quieres llamar la atención haciendo una de tus travesuras,  debería de tener mano dura con ello pero a veces me parece divertido y hasta tierno lo que haces ¡Qué tal ingenio!.  Te veo y créeme que me veo a mí, comenzando que eres zurda, tienes manías muy parecidas a las mías  como cuando me quedo en el patio mirando el cielo y he visto que tú también lo haces o cuando pones tu cara de desentendida  cuando no entiendes lo que te dicen y más cuando habla mi mamá (jajaja).  

Te quiero mucho mi bonita.     

“ A un perro no le importa si eres rico o pobre, educado o ignorante, inteligente o tonto. Dale tu corazón y él te dará el suyo”  (Marley & Me)

*El video dura 00:01:26 (No sé cortar la música)

Abril/2o1o